7. FARMACOLOGÍA EN EL ANCIANO
Blasco FP, Pérez RM, Martínez JL, Jiménez AI, García MJN. Estudio del consumo de fármacos inadecuados o no indicados en el anciano que ingresa en un Servicio de Medicina Interna. Anales de la Medicina Interna [revista en internet] 2008 [acceso 4 Nov 2014]; 25 (6).
Disponible en: http://scielo.isciii.es/pdf/ami/v25n6/original3.pdf
El consumo general de fármacos en ancianos de países industrializados se caracteriza por el incremento, en cantidad, de media 4,2-8 fármacos/persona/día (1-3) y por el tipo de fármaco. Se estima que el 97% de los que viven en residencia y el 61% de los que viven en domicilio consumen un fármaco inapropiado o inadecuado.
El primer paso para conseguir una adecuada prescripción sería estimar cuántos fármacos consume una persona que son innecesarios o inadecuados, y la disminución de los Efectos Adversos por Fármacos (EAF).
El objetivo de este estudio se basa en el establecimiento del porcentaje de ancianos que consumen este tipo de fármacos entre los que ingresan en un Servicio de Medicina Interna y la importancia que este consumo pueda tener en relación con el incremento de efectos adversos.
Mediante este estudio se ha podido comprobar que el consumo de fármacos se ha incrementado en las últimas dos décadas en países industrializados de forma llamativa, afectando sobre todo a la población anciana. Otros datos que aporta el estudio observan un marcado consumo de fármacos injustificados en las residencias de ancianos si bien este es del 65,2% de los pacientes ingresados vs. El 48% de los procedentes de su domicilio.
Otro factor encontrado en este estudio es el consumo de mayor número de fármacos. Los ancianos que más medicamentos toman por sus patologías son a su vez los que mayor número de fármacos injustificados consumen.
El último factor independiente asociado al consumo de fármacos injustificados es la demencia. Algunos estudios estiman que el consumo de psicótropos en los ancianos dementes alcanza el 41%.
Como conclusión, mediante este estudio podemos observar que la mitad de las personas ancianas toma al menos un fármaco de forma innecesaria. De esta forma se produce una serie de efectos adversos en los ancianos.